PFJ 2018

Oportunidades para crecer y ser fortalecido espiritualmente hay miles. Participar del programa para jovenes PFJ como consejera fue la mejor decision que he tomado ultimamente. Y es que si conocieran las historias de vida de los jovencitos que participaron o si tan solo hubiesen sentido el amor de Dios que irradian sus caritas, comprenderian mis palabras sin lugar a duda.
 En mi corazon PFJ tiene un gran lugar. Para mi fue donde todo comenzo, en los viejos tiempos se llamaba EFY, pero solamente son otras siglas para el mismo campamento. Como habia escrito antes, ese fue el esenario en el cual obtuve mi primer testimonio. Fue la cuna de mi interes hacia el plan de salvacion y mi fortaleza en tiempos de decisiones drasticas.
 Ahora que ya pasaron 6 años de esa primer experiencia puedo decir que veo los frutos de ese primer paso de fe, de esa oportunidad que me dio mi Padre Celestial de volver a la senda que conduce hacia su morada. Fui bautizada y continuo cumpliendo con mis convenios que lleve al templo en una hermosa mañana de enero en 2016 antes de servir una mision de tiempo completo en Armenia Yerevan. El cumplimiento de mi sueño mas preciado de cumplir con una mision fue el detonante para saber que lo que mas quiero es tener una vida llena de servicio al projimo.
 Pero volviendo al tema, esta vez fui como consejera y esta vez fue el tiempo de los chicos. Esta vez pude ver a chicos que quizas el primer dia, desanimados por no conocer a nadie, querian volver a su casa y quedarse en su zona de confort. Sin embargo a mitad de semana ya eran parte de una nueva familia. La union que vi en la compañia 3 fue algo que creo que ni yo experimente.
 Realmente son chicos muy especiales. Se que el Señor preparo a estos jovencitos para nacer en este tiempo. En una epoca en la cual van a ser mas tentados de lo que lo fui yo cuando era una adolecente quizas. Pero al mismo tiempo tambien son espiritus mas fuertes, chicos mas dedicados y que confian en el Señor muchisimo.
 Al final de la semana muchos de los jovenes compartieron que querian servir misiones de tiempo completo. Lo cual va a vendecir sus vidas y la de miles de personas.
 Me llevo muy buenos recuerdos en mi corazon y siento alguna responsabilidad en cuanto a estos chicos, al igual que una madre cuida de sus hijos. Se que Dios me llamo como consejera del PFJ por un motivo. Y ese es ayudar a los jovenes a venir a Cristo y hallar paz en El.